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La tasa de divorcios en España se incrementa cada año de forma exponencial, registrando cifras sumamente altas como las del año 2016 en donde se registró únicamente en los tres primeros meses del año más de veintiocho mil divorcios.
Ahora bien, en lo que respecta al ámbito de los divorcios siempre ha existido una interrogante: ¿la infidelidad altera o afecta el proceso de divorcio? Para responder a dicha pregunta hemos desarrollado el presente artículo en el cual expondremos como la infidelidad puede influir en los procesos legales que supone la disolución de un matrimonio.
¿En el contexto de infidelidad se puede exigir una indemnización?
No es posible solicitar indemnización por la infidelidad cometida por uno de los cónyuges durante el proceso de divorcio, ya que la causa o motivo del divorcio no es relevante para los tramites de la separación, de esta manera, no se puede justificar la exigencia de una pensión compensatoria o indemnización con la infidelidad como argumento válido.
La base de esta respuesta se encuentra plasmada en los artículos 43 y 42 del Código Civil, en donde se especifica que el incumplimiento de la llamada promesa matrimonial (en la cual la pareja se prometen fidelidad) no se concibe como un argumento válido para que la víctima exija un beneficio. Esto se basa en el principio de respeto a la libertad personal e individual de cada individuo.
¿Para qué sirve entonces las pensiones compensatorias?
Las indemnizaciones o pensiones compensatorias pueden ser solicitadas si se encuentran argumentos válidos para exigir la misma. Como se mencionó anteriormente la infidelidad no es considerada un argumento válido, no obstante, puede utilizarse el contexto de la infidelidad para justificar abandono y desprotección por parte del cónyuge infiel a su pareja, lo que puede ayudar a justificar una pensión compensatoria en el proceso de divorcio.
¿Qué sucede con los descendientes del matrimonio?
Si bien la infidelidad implica ser un mal esposo o esposa, esto no supone necesariamente ser una mala madre o padre, e igualmente, para las leyes vigentes la infidelidad no influye en el establecimiento de convenios reguladores sobre la guarda y custodia de los hijos, la pensión de alimentos, etc.
Por lo tanto, a pesar de que la infidelidad de uno de los cónyuges es la causa de la separación durante esta situación no influirá en la sentencia de los convenios reguladores anteriormente mencionados.
¿Puede tomarse la infidelidad como argumento de separación por culpa?
La infidelidad supone una oportunidad para que el cónyuge afectado opte por un divorcio de culpa cuando el mismo cuente con pruebas verídicas que puedan utilizarse ante el juzgado para comprobar la infidelidad.
La infidelidad estrictamente no puede aplicase como argumento único para solicitar un divorcio o separación por culpa, ya que es necesario que dicha infidelidad cumpla con los requisitos que se mencionaran a continuación:
- Que la infidelidad produzca una violación severa de las obligaciones y deberes del matrimonio.
- Que la infidelidad se produzca una violación severa a las obligaciones y deberes con los descendientes o hijos.
- Que la vida común de los cónyuges sea intolerable y deba cesar de manera inmediata.
Consecuencias del divorcio o separación por infidelidad
No existen consecuencias legales, tribunales y judiciales específicas para la infidelidad. Las leyes de España no consideran la infidelidad un agravante condenable en los procesos de divorcios, lo que significa que no supone implicaciones mayores o indemnizaciones.
No obstante, es importante comprender que la infidelidad es uno de los argumentos más utilizados en las demandas por abandono y falta de cumplimiento de las llamadas obligaciones conyugales.
Convenios reguladores
Como se mencionó anteriormente, el Juez no tendrá en cuenta la causa de la separación o divorcio, es decir la infidelidad, cuando defina los convenios reguladores entre ellos la pensión para alimentos, custodia entre otros convenios relacionados con la protección de los menores de edad. Las pensiones son estipuladas según el ingreso económico de los cónyuges, las necesidades de los menores, numero de descendientes, entre otros detalles.
¿Cómo se dividen o reparten los bienes en un divorcio con infidelidad?
Teniendo en cuenta que el divorcio por infidelidad no existe, la repartición de los bienes y las deudas se llevara a cabo al igual que en un divorcio que se suscite sin infidelidad.
Para la división de las deudas y bienes que se hayan generado durante el matrimonio, el juez optara por una división en partes iguales o no dependiendo del contexto del divorcio, ya que en caso de que uno de los cónyuges tenga más culpa o se determine que posee mayores necesidades económicas, la división puede llevarse a cabo en porciones no iguales.
Los bienes que serán divido serán todos aquellos que se contemplen como bienes matrimoniales en el régimen económico matrimonial, de esta manera aquellos bienes separados no se toman en cuenta en la separación.
La partición de los bienes puede llevarse a cabo de manera independiente sin recurrir a la corte la cual es la forma más asequible y rápida que agilizara el proceso de divorcio, o si los cónyuges no logran acordar la separación de los bienes intervendrá un abogado y la corte lo cual aumenta considerablemente la duración y el precio de este proceso legal.