¿Cuánto se paga de impuestos por las inversiones?

Quienes se inician en el mundo bursátil en ocasiones pecan de ingenuos al suponer que no tendrán la obligación de declarar ante Hacienda los dividendos obtenidos mediante sus inversiones, pero cuánto se paga de impuestos por las inversiones. La realidad es que están obligados a tributar por este concepto, por lo que para hablar de verdadera rentabilidad deben excluir el monto de los impuestos de sus beneficios.

Un concepto que todo inversor debe tener presente es la fiscalidad de una inversión, pues las apariencias pueden engañarle. Es posible que al revisar por encima las ganancias de una acción se nos conviertan en un objeto de deseo, pero cuidado que puede que no hayamos reparado en su carga fiscal.

¿Cuáles son los productos por los que se pagan menos impuestos?

No todos los productos financieros tributan de igual forma, por lo que es conveniente revisar cuales ofrecen condiciones más favorables. A continuación hablaremos de algunos de ellos.

Comencemos por los fondos de inversión y los planes de pensiones, pues ambos son de los que tienen una fiscalidad más conveniente. Los primeros no suponen el pago de impuestos, siempre y cuando los beneficios se inviertan en el mismo fondo o en algún otro similar. Algo parecido ocurre con los segundos, un producto financiero que ofrece las ventajas siguientes:

• Admiten las transferencias de un plan de inversiones a otros sin tener que pagar impuestos
• Es desgravable en la declaración del impuesto sobre la renta de las personas físicas.
• El tributo tan solo tiene lugar en la oportunidad del rescate de los fondos

La venta de acciones y el cobro de dividendos

Lo primero que debes saber cuándo inviertas en la bolsa es que las ganancias recibidas en la oportunidad de la venta de las acciones, pagan impuestos del mismo modo como lo hacen los intereses de los ahorros. En términos prácticos esto supone que el tributo no tendrá lugar al percibir los beneficios, sino en la oportunidad de la declaración del impuesto sobre la renta.

El porcentaje de impuesto a pagar varía de acuerdo al rendimiento, así si los beneficios no superan los 6.000 euros, deberás pagar un monto correspondiente al 19% de las ganancias, incrementándose a un 21% si pasan de los 6.000 euros pero no superan los 50.000 y a un 23% una vez que sobrepasen este último monto.

Para entenderlo más claramente es preciso indicar que el porcentaje aplicable de tributo es solo sobre la plusvalía, es decir sobre la diferencia entre el monto de compra de la acción y el precio de venta al formalizar la operación. Veamos un ejemplo práctico.

Supongamos que invirtió 1.000 euros al comprar 100 acciones de determinada compañía a 10 euros cada una y al momento de venderlas obtuvo 2.000 euros. En este caso la plusvalía corresponde a 1.000 euros y es sobre este monto que deberá tributar  a Hacienda. Como la ganancia se encuentra por debajo de los 6.000 euros entonces el porcentaje aplicable es el 19% por lo que el beneficio neto será de tan solo 810 euros, pues los restantes 190 se pagarán por concepto de impuesto.

Otro elemento importante a tomar en consideración es que la escala impositiva es progresiva, esto significa que al momento de hacer el cálculo del impuesto a pagar se hace por rangos. Recurriremos de nuevo a un caso práctico. Supongamos que la plusvalía por la venta de las acciones fue de 60.000 euros, entonces por los primeros 6.000 aplica el 19%, por  los 44.000 restantes, al entrar en el segundo rango, se tributará un 21% y por los 10.000 faltantes, un 23% al superar el último rango.

Esta escala es aplicable por igual al cobro de dividendos.